6/11/17

Ni con otro Pitanazo pudieron



Los clásicos se ganan y no importa como. Dice una de las "verdades" futboleras. En un clásico poco importan los antecedentes inmediatos. Reza otra. Asi las cosas Boca volvio a provocar otro Silencio Atroz, versión ya ni sabemos cual, suma 8 triunfos consecutivos en el arranque del torneo y dejo a 12 puntos de distancia al rival de ayer.
Se ganó y se festejó a rabiar. Poco importan los análisis. Solo destacar que todo Boca estuvo a la altura y en tren de analizar más fino, no brillaron las habituales estrella y si lo hicieron los que habitualmente son "actores de reparto". 
Atrás hubo un más que satisfactorio rendimiento. Rossi respondió con acierto cuando se lo necesitó sacándole un mano a mano a Scocco, estuvo impecable de arriba, no tuvo chance en el gol de Ponzio y si algo se le puede achacar fueron dos entregas rápidas y fallidas que pudieron traer consecuencias. Los laterales impecables en la fase defensiva no pesaron demasiado en ataque, sobre todo Fabra, a pesar de subir mucho. Goltz brilló a gran nivel. Se deglutio a Scocco y estvo impecable de arriba y cerrando hacia los costados. Magallan, al igual que Rossi, bien defendiendo y bastante complicado cuando le toco salir con la pelota.
En el medio la sobriedad de Barrios, el gran equilibrista de todo el equipo. Acertado en la marca y por lo general con el pase justo para salir. Y eso que el local lleno el medio de volantes con mucha intensidad de presión. Pablo Pérez en la función de Gago alterno malas y buenas, pero la asistencia exquisita a Nandez en el segundo gol borra todo lo malo. Y el nombrado uruguayo, de flojo primer tiempo, tuvo un segundo tiempo consagratorio. Rego la cancha de sudor, se multiplicó en la marca y escalo continuamente por la derecha. El línea le frustró un mano a mano cobrando orsay inexistente y más tarde definió bárbaro el partido.
Arriba no brillaron ni Pavón ni Benedetto. Pipa estuvo incómodo todo el partido entre los centrales y Pavón de gran desgaste ocupado en la faz defensiva como pocas veces, desbordo pocas veces y por lo tanto no abastecio al Pipa como habitualmente. Y por último Cardona. El colombiano venía teniendo su gran partido. Acertado en las pausas en el primer tiempo. Provoco un par de revolcones de Lux, a él golpeo salvsjemente Fernández viendo acertadamente la roja, de ese tiro libre marcó un gol de los que serán inolvidables y cuando parecía tener un segundo tiempo a pedir de él con espacios que inevitablemente aparecerían, llego el Pitanazo volumen II. De la nada el arbitro "compra" la simulación de Enzo Pérez de un supuesto codazo (inexistente) y lo expulsa. Y asi, Pitana, que ya a instancias de su asistente había frustrado un ataque de Nandez con olor a gol, los mete en el partido de nuevo cuando ya estaban para el cachetazo. La faena la completo el otro línea cuando marco corner una pelota que no había salido y, que desentendimiento de todo Boca mediante, ante el banderin levantado, era el empate en dos. Justicia poética despues de tres años del Pitanazo I, cuando hasta hicieron remeras con el NO FUE CORNER. Escupieron para arriba y terminaron salpicados.
Falta mucho, nada está definido, pero anda a sacarnos la alegría que tenemos. Pucha que es lindo ser Bostero!!!

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