Se fue un grande de verdad

   Ha fallecido a los 100 años, Francisco “Pancho” “Cañoncito” Varallo, el tercer goleador histórico de Boca con 194 goles, último sobreviviente de la Selección Argentina que jugó la final del Mundial de Uruguay de 1930.

   Fue durante 7 décadas el máximo goleador Xeneize en el profesionalismo, hasta que su marca fue batida por Martín Palermo en marzo de 2oo9.

   Llegó a Boca procedente Gimnasia y Esgrima de La Plata en 1931. Jugó 222 partidos entre el 31-05-1931(0-0 frente a Chacarita) y el 8-12-1939 (2-0 ante Huracán, con gol a los 11´del pt) disputando la Copa Adrián Escobar. Tuvo un impresionante promedio de 0,87 goles por partido, casi un gol por partido durante toda una década. Se consagró campeón en 1931, 1934,1935 de Primera División y se retiró ante de cumplir 30 años por una lesión en los meniscos, ¿con la medicina de hoy, hasta que edad habría jugado, cuantos goles más habría convertido?, nunca lo sabremos, pero lo cierto es que fue un extraordinario delantero que mantuvo la vigencia de su récord por 70 años. Pero por sobre todo esto fue una persona excepcional, que mantuvo su lucidez, su bondad y su don de gente hasta el último día de su siglo de vida. Y esto sin dudas es más importante que cualquier récord en cualquier cancha.

   Se fue un grande en serio. Los Bosteros jamás lo debemos olvidar.